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martes, 18 de septiembre de 2012

JOSE SANTOS GONZALEZ PERIODISTA Y ANARQUISTA CHILENO


José Santos González Vera periodista y anarquista chileno

 El 17 de septiembre de 1897 - aunque oficialmente nació el 2 de noviembre de ese año, pero su padre, contrario al registro civil, se vio obligado a inscribirlo - nace en San Francisco del Monte, hoy conocida simplemente como El Monte, situada cerca de Santiago de Chile (Chile), el periodista y escritor anarquista José Santos González Vera. Sus padres fueron José Santos, alfabetizador de los carabineros rurales y que llegó a ser comandante de policía en Tiltil, y Laura Vera. En 1903 se trasladó a Talagante, donde estudió en la escuela rural del pueblo - experiencia que luego le serviría de inspiración para su obra Aluhé. Cuando tenía 11 años se estableció en la capital chilena y se matriculó en el Liceo Santiago - actual Liceo Valentín Letelier -, sin lograr aprobar el primer año de Humanidades ya que fue expulsado por no querer estudiar caligrafía, canto y gimnasia y para reírse de los frailes, pero donde conoció Sergio Atria, que lo introdujo en la literatura de los naturalistas franceses (Daudet, Zola, Balzac, Francia, etc.). Bajo la influencia de sus padres y de otros amigos, como José Domingo Gómez Rojas, centró su actividad intelectual en la escritura. En 1915 dejó su familia y se instaló en un conventillo de la calle Maruri de Santiago, lo que ejercerá una gran influencia en su obra, y se puso a trabajar en diversos oficios (rotulista, pintor de carruajes, mensajero, limpiabotas en un club, obrero de fundición, aprendiz de barbero, empleado de sastrería, cargador en una casa de subastas, tabernero los ferrocarriles, mozo de biblioteca, encuadernador, secretario de una sociedad de carniceros, comisionista, cajero de almacén, vendedor de libros , cobrador de tranvías en Valparaíso, etc.) y entró en contacto con el mundo de los marginados de la ciudad, hasta que pudo decantarse claramente por la literatura. En estos años comenzó a militar en los círculos anarquistas, especialmente el «Centro Francisco Ferrer Guardia", leyendo los clásicos (Maksim Gorki, Piotr Kropotkin, Élisée Reclus, Max Stirner, Mikhail Bakunin, etc.) Y poniendo su escritura al servicio de el anarcocomunisme. Fue redactor y fundador de la revista La Pluma, con el escritor anarquista Manuel Rojas, y Numen, y colaboró ​​en la revista Claridad, órgano de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), a la que estaba afiliado, y en La Batalla. También escribió en las revistas Atenea de la ciudad de Concepción y Selva Lírica y en el periódico La Mañana de Temuco. Como la literatura no le da para vivir, se hizo ayudante de forja en Valdivia y luego peletero y corrector de pruebas. En 1920, durante la persecución a la FECh, a raíz del montaje político-militar de la conocida como «Guerra de don Ladislao", huye al sur del país, donde conoció a Temuco el joven estudiante Pablo Neruda y la poetisa Gabriela Mistral, con quien hizo una firme amistad. En esta época su gran compañero fue el escritor anarquista José Domingo Gómez Rojas, que fue detenido en el asalto de la FECh y murió en prisión a consecuencia de las torturas infligidas. En 1932 se casó con María Marchant, maestra y militante comunista, con quien tuvo dos niños, Alvaro y María Elena. Realizó viajes por Argentina, Venezuela, Colombia, Ecuador y Perú. En 1950 se le otorgó el Premio Nacional de Literatura en su obra literaria, considerada «minimalista», lo que le ayudó a vivir más honestamente ya que siempre había vivido al límite de la pobreza, aunque el corredor de sus acciones hizo quiebra en la Bolsa huyendo del país con lo que le quedaba - «el corredor, corrió», bromea. En 1951 publicó su autobiografía Cuando era muchacho. En 1957 se jubiló funcionario, como jefe del Departamento de Cooperación Intelectual de la Universidad de Chile, donde obtuvo el cargo de secretario de la Comisión Chilena, encargado de las becas en instituciones internacionales. En 1959 publicó unos ensayos sobre los autores de su generación (Manuel Rojas, Augusto D'Almar, Federico Gana, Gabriela Mistral, Jorge González Bastías, Alone, Mariano Latorre, Baldomero Lillo y Ernesto Montenegro) bajo el título Algunos. Entre sus obras, donde el mundo proletario es omnipresente, destacan Vidas mínimas. Novelas breves (1923), El conventillo (1928), Una mujer (1928), Alhué. Espampas de una aldea (1928), Eutrapelia, honesta recreaciones (1955), La copia y otros originales (1961) y Necesidad de compañia (1968). Siempre dijo que su vida literaria era consecuencia de su vida de anarquista y no al revés. José Santos González Vera murió el 27 de febrero de 1970 en su domicilio de Ñuñoa en Santiago de Chile (Chile). En 1971 el Municipio Providencia bautiza una pequeña plaza con su nombre. Actualmente existe la «Biblioteca Popular y Libertaria José González Vera», ubicada en la Población Santa Ana de Recoleta (Santiago de Chile) donde vivió.

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